Los dólmenes encontrados aquí hacen suponer que ya desde tiempos muy remotos existió un asentamiento prehistórico. Más tarde, los fenicios ocuparon el lugar, que fue posteriormente territorio romano. Su historia oficial comienza en el año 1230, cuando Alfonso IX de León conquista la población a los árabes para cederla a
Y fue precisamente con los caballeros templarios, como comenzó una de las grandes etapas de esplendor de Jerez, que culminó con la disolución de
Durante el transcurso de los siglos XIX y XX, los pilares que han sustentado su economía han sido la floreciente industria del corcho y la ganadería, aunque en la actualidad el turismo supone un creciente ingreso para la localidad.
El acceso a este lugar viene dado por dos magníficas puertas de la antigua muralla, las únicas que sobreviven de las seis que tuvo el recinto amurallado en la antigüedad, la puerta de
Esta construcción, unida a las numerosas torres barrocas de la ciudad fue la causante de que en épocas anteriores se conociera al lugar con el nombre de Jerez de las Altas Torres. Muy cerca aparece
Las calles estrechas y los paradigmáticos rincones obligan al visitante a realizar el recorrido a pie para disfrutar de una amplia gama de estilos arquitectónicos, correspondientes a los vestigios que nos ha dejado cada una de las culturas que la han habitado, castillos templarios, edificio de
La plaza Mayor, también llamada plaza de España, es el punto donde confluyen las principales calles y arterias de la ciudad. En ella se encuentran, además de las Casas Consistoriales, la famosa torre de San Miguel, perteneciente a
En cuanto a otros edificios de carácter religioso, de los que la ciudad cuenta con un amplio surtido, se conserva la iglesia de San Bartolomé, del siglo XV, a la que se incorporó en el siglo XVIII una impresionante torre barroca, tras el hundimiento de la original. Esta iglesia guarda la capilla de los Comendadores, donde se encuentra el sepulcro de Vasco Pérez, impulsor de la obra, junto a su esposa.
Al oeste se haya la iglesia de Santa Catalina, de finales del siglo XVI y perteneciente al estilo gótico, aunque el edificio muestra, sobre todo en la torre, cierta tendencia al neoclasicismo. De este mismo siglo data la iglesia de Santa María de
El convento de Nuestra Señora de
En Jerez destaca su hermosa Semana Santa, de influencia andaluza y gran poder evocador, cuyas procesiones por sus estrechas calles consiguen que el visitante se impregne del arte y del seguimiento que desprenden. Las fiestas patronales en honor a San Bartolomé cuentan con elementos típicos del lugar como es el antiguo ritual de la quema del rabo del diablo.
2 comentarios:
Excelentemente descrita, pero mejor visitarla se sorprenderá de su belleza. Unos amigos me llevaron desde Madrid, mereció la pena.
Es un pueblo realmente maravilloso. merece mucho la pena visitarlo: sus monumentos, antigüedades, iglesias. todo rodeado de una interesante historia. ahora bien, os recomiendo zapatos planos... las calles son empedradas y hay muchas cuestas.
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