sábado, 18 de abril de 2009

Cáceres



He hecho unos videos de Extremadura, de momento Cáceres y Badajoz, todavía no se si funcionaran, espero que si.

Me encanta la poesía, pero soy incapaz de hacer ninguna, y es que no solo se tienen que tener las ideas y el sentimientos, hay que saber expresarlos, y desgraciadamente este no es mi caso, por eso suelo copiar las poesías que me gustan, espero que si hay algún autor que le molesta me lo haga saber y las quitaré inmediatamente. Esta es de Javier Feijoo, en mi opinion preciosa.


EXTREMADURA, Sí, EXTREMADURA!

¡Extremadura, sí, Extremadura!

Entre rosas empuñadas bajo un vuelo de gaviotas...

Esperando.

Marañas de poder

cubren tus campos

y tus pueblos

de níveos encalados.

Y dolosas aún entonan tus rapsodas

viejas deudas que jamás se amortizaron.


¡Extremadura, sí, Extremadura!

Tierra y sol,

sudor callado...

Tatuajes indelebles

en tus manos.

Hoy tu rostro,

siempre recio, siempre pardo,

curtido bajo el sol más generoso,

se dibuja goloso, sin rubor subvencionado,

reavivando el color de los silencios

degollados con el filo del arado.


¡Extremadura, sí, Extremadura!

Campo y cielo,

campo, campo...

Tierra abierta a los castizos de nacencia

con olor a lejanía, remarcados

con el hierro incandescente del progreso permitido

a ingratos codiciosos de poder y en avaricia malcriados,

que hoy degustan con soberbia ese jugo efervescente

exprimido a tu sudor y a tu trabajo.


¡Extremadura, sí, Extremadura!

Voz y voto apacentado con paciencia desmedida,

y gruñidos desquiciados de berraco enrabietado

confundido con reclamos de futuros

extraños a tu oído extremo y llano.

Diglosia en las veredas de una tierra

que labrada con los versos de otros cánticos

atesora tu fuerza arrolladora

y adorna con su paz tu liderazgo.


¡Extremadura, sí, Extremadura!

¡La de gritos que aún retumban

en tus campos

contra el eco de lucrados consentidos!

¿Y aún caminas voceando

tus lamentos,

cuando al frente, al costado,

y a tu espalda,

vas quedando

sin pudor, negando historia,

tu cultura y tu verbo hechos migajas,

y empapado con tus credos

vas vendiendo

los pañuelos desdentados

con tus lágrimas?


¡Extremadura, sí, Extremadura!

¡Estremézcase tu piel parda,

piel dura,

y reluzca en tu mirada

la esperanza!

¡Que rebrote de la tierra

tu bravura

y en tu frente

brille el sol

de otras mañanas!

¡Reivindica los derechos adquiridos

con el peso del trabajo

que esparcido

desnivela a tu favor

cualquier balanza!


¡Extremadura, sí, Extremadura!

Paño verde, blanco y negro,

de esperanza,

pureza y sentimiento.

Desde el cielo más azul

del firmamento

descolguemos orgullosos esa falda

que lucen con alarde nuestras madres,

altivas, arrogantes, con talento,

concienciadas

de la herencia de unos pechos

que amamantan con coraje

y sin complejos

exquisitas bondades adobadas

con la historia que escribieron con su sangre

los valientes que surcaron los océanos.


¡Extremadura, sí, Extremadura!

Entre rosas empuñadas bajo un vuelo de gaviotas...

Esperando.

Tierra y sol,

sudor callado...

Campo y cielo,

campo, campo...

Voz y voto apacentado con paciencia desmedida,

y gruñidos desquiciados de berraco enrabietado.

¡Estremézcase tu piel parda,

piel dura,

por los gritos que aún retumban

en tus campos!


¡Extremadura, sí, Extremadura!

Paño verde, blanco y negro

de esperanza...

Luz y sombras

en los pliegues de tu falda.


JAVIER FEIJOO


No hay comentarios: